top of page
Buscar

Y seguí cantando...

  • Foto del escritor: EmaBlogger
    EmaBlogger
  • 23 abr 2019
  • 2 Min. de lectura

Desperté con un nudo en la garganta. Muchas veces me cuesta lidiar conmigo misma y con todas las imágenes e ideas que saltan en mi cabeza, muchas de ellas no me hacen bien.

Me molesto conmigo misma. Es triste aceptar que no soy mi mejor amiga y de hecho voy criticándome al punto de no aceptar cosas que quizá hice bien hasta ahora.

Estoy bastante consciente que aceptar todo esto debería ayudarme a justamente dejar de latiguearme pensando en todo lo que no hice, lo que no dije, lo que no ví, sin embargo me quedo en la primera grada, solo acepto que no me acepto.


¿Qué me lleva a ser mi enemiga?, no lo entiendo. Tengo lo necesario para ir y volver, leer y entender, escribir y reir, sin embargo me resulta insuficiente y me siento mal, que gran malagradecida.

¿Existe alguna manera en la que pueda abuenarme conmigo?, resulta que a mi alrededor las cosas parecen ser prósperas, alrededor mio va bien, como satélites de bonanza y buenaventura, y el vacio se vuelve mas palpable.

Creo que debo dejar de compararme. La mejor manera de poder concentrarme en mi misma es viendome, sin satélites ni hermosos planetas perfectos, mi planeta es todo menos eso, pero es lo que hay, y siento la necesidad de tomar mas atención a lo que tengo, más de lo que pensé.

Quizá aun suena en mi cabeza que si pudiste subir dos gradas, tienes fuerza para subir cuatro mas, o quizá la vecina pudo subir seis gradas a la primera, y me siento vencida, no lo sé.

Lo que si se, es que dentro mio existen las ganas de tenderme la mano y abrazarme, vivir en armonía pase lo que pase alrededor mío, aunque los perfectos planetas que trabajan 10 horas, tienen 3 hijos y aun así se ven como recién salidas de la peluquería lo logren, bien por ellas...

Momento, necesito parar acá. Necesito parar de ver las cosas de esta pésima manera. No me lleva a nada, mas que echarme mas tierra en un eterno velorio, y esto no puede continuar más.

Si, hay muchas cosas que me molestan, muchas de las cuales sé que podría mejorar, sé que podría hacer y dejar de hacer, pensar y dejar de pensar, y otras tantas que simplemente no puedo controlar, como la vida, las personas, los satélites y sus perfectas vidas, o sus perfectos satélites llenos de imperfecciones que lo hacen perfecto.


Entre perfectible y ser imperfectamente perfecta, para mí.

Entre vivir y existir, para mí.

Entre leer y respirar, entre entender y poder volar.

Sólo tengo esto, que es lo más preciado, para mí.


Abrázate y escucha este himno de María Elena Walsh... Negrita linda un beso para tí hasta el cielo.



 
 
 

Entradas recientes

Ver todo
Non, je ne regrette rien...

Los desfiles patrióticos siempre me parecieron un tanto violentos, por su muestra de armas bélicas y poderío militar. ¿Honrar a tu patria...

 
 
 

Comments


bottom of page